Familia Miralles


A propuesta de María del Mar, que fue la que organizó la comida, pongo de nuevo las fotos (ya no las quito para que podáis veros cuando queráis), y confío en que vuelva a organizarla el próximo año, porque ha sido una buena cosa y las buenas cosas hay que repetirlas.

Se pueden añadir comentarios, así que quien quiera, que diga lo que se le ocurra.

Yo comento, por ejemplo, que cuando hicimos esta foto, los niños ocuparon inmediatamente su lugar, allá en lo más alto, sin preguntar a nadie; mientras que los mayores preguntaban dónde debían ponerse.

Ah, y no hay que olvidar el fantástico árbol que nos acompaña, el ficus de Santo Domingo, un placer fotografiarse junto a un ser vivo tan magnífico.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fisuras de la globalización